En el masaje Et Suseia incorporamos piedras calientes de basalto como una herramienta complementaria, profundamente terapéutica. Estas piedras, formadas por la energía del fuego volcánico, tienen una capacidad natural para retener y transmitir el calor de forma lenta y constante.
Cuando las aplicamos sobre el cuerpo, a la temperatura adecuada y en zonas específicas, ayudan a relajar la musculatura en profundidad, mejorar la circulación, aliviar contracturas y favorecer un estado general de calma y receptividad. El calor penetra suavemente, disolviendo tensiones y complementando el masaje.
Las piedras se integran de manera armónica con nuestras manos, alternando contacto directo y movimientos sincronizados.
Su presencia se siente como un susurro cálido que acompaña y sostiene.
Especialmente en estados de fatiga, rigidez o sobrecarga muscular las piedras se convierten en un puente entre la tierra y el cuerpo, aportando arraigo, descanso y alivio duradero.
Masaje de 60 min (incluye piedras volcánicas) o Masaje de 90 min (incluye piedras volcánicas + masaje craneofacial)
Diseñado para el peregrino del Camino de Santiago
El masaje Et Suseia nace de nuestras manos y de nuestra escucha, de la experiencia compartida entre nosotros, al acompañar con cuidado y presencia a cientos de peregrinos que pasan por nuestro centro, justo a pie del Camino, en Sarria.
A lo largo del tiempo hemos tomado amplia experiencia, masajeando los cuerpos de los caminantes: sus tensiones acumuladas, el cansancio profundo, el peso en los pies y en las piernas, las contracturas que asoman en la espalda, el cuello, las molestias articulares, las tendinitis que susurran con cada paso. Cada dolencia nos habla, y nosotros respondemos con un tacto atento y reparador.
Cada sesión es única, una pausa en el viaje donde el cuerpo encuentra alivio y el alma, descanso. Nos adaptamos a lo que el peregrino necesita, con respeto, conocimiento y sensibilidad, combinando profundidad, precisión y calidez.
Et Suseia es un masaje que acompaña. Que comprende el esfuerzo. Que honra el andar. Es una forma de cuidar al caminante, allí donde más lo necesita.
Abandonamos la perfeccion para encontrar la excelencia.
Masaje de 60 min o Masaje de 90 min
Compartir el descanso, vivir el cuidado
En Et Suseia también ofrecemos la posibilidad de recibir nuestro masaje en pareja, o a dos personas al mismo tiempo, en la misma sala. Cada persona es atendida por uno de nosotros – Sonia o David – y tratada de forma personalizada, según sus necesidades físicas y su estado general en ese momento.
Recibir un masaje junto a otra persona es una experiencia especial. Puede vivirse como un regalo compartido, una pausa en común, un momento de cuidado que fortalece el vínculo. No se trata de un masaje idéntico para ambos, sino de una vivencia simultánea, donde cada uno es acompañado de manera única y consciente.
Los beneficios del masaje Et Suseia se multiplican cuando se comparten: el cuerpo se relaja, se suelta la tensión, y el alma encuentra un espacio de descanso… en compañía. Es un momento de conexión, de presencia y de bienestar conjunto.
Ideal para parejas, amistades o compañeros de camino que desean cuidarse mutuamente y disfrutar de un instante de armonía, el masaje a dos es una invitación a detenerse juntos, a habitar el aquí y ahora en calma y con atención.
Masaje de 60 min
Un arte sanador nacido del corazón de Hawáii
El masaje lomilomi no es solo una técnica corporal: es una antigua forma de sanación que nace de la sabiduría ancestral del pueblo hawaiiano. En su esencia, lomilomi significa “amasar”, pero también se asocia con la imagen de una ola que envuelve, limpia y transforma. Y así se vive: como un viaje profundo hacia el interior, donde cuerpo, mente y espíritu se armonizan en un mismo aliento.
Tradicionalmente, el lomilomi era ofrecido por kahunas (sanadores) como parte de rituales de purificación, transición o reconciliación. Era un acto sagrado, impregnado de oración (pule), intención clara y conexión espiritual. En cada movimiento vive la memoria del océano, el ritmo de la naturaleza, el respeto por los ancestros y la confianza en la fuerza de aloha: el amor que sostiene la vida.
En Et Suseia, practicamos el lomilomi desde un lugar de profundo respeto y entrega. Hemos sido formados e iniciados en este arte, no solo aprendiendo sus movimientos envolventes, rítmicos y fluidos, sino también encarnando la actitud interior que lo hace verdaderamente transformador: presencia total, escucha silenciosa, tacto orante.
Una sesión de lomilomi es como una ceremonia. El cuerpo se recuesta sobre la camilla, pero algo más se entrega: memorias, tensiones, patrones antiguos. Las manos y antebrazos del terapeuta fluyen como olas cálidas, creando un espacio seguro donde todo puede ser soltado. A veces se llora, otras se sonríe desde dentro. Siempre se vuelve diferente.
El lomilomi no busca “arreglar” nada, sino recordar al cuerpo su armonía natural. Desde esa memoria profunda, brota la sanación.
En cada sesión, honramos la tradición que hemos recibido, trayéndola al presente con autenticidad y gratitud. Porque sanar, para nosotros, no es intervenir. Es acompañar. Es amar desde el silencio.
Masaje de 60 min
Una técnica ancestral y científica para sanar
El quiromasaje es mucho más que un simple masaje manual: es una técnica profundamente integradora que conecta al terapeuta con el cuerpo del paciente a través de la manipulación consciente de los músculos, tendones y tejidos. Este arte curativo, aunque tiene raíces en antiguas tradiciones de masaje, fue sistematizado y perfeccionado en la actualidad por el Dr. José Ferrándiz, quien impulsó su desarrollo desde un enfoque científico y terapéutico.
El Dr. Ferrándiz, médico de profesión, dedicó su vida a estudiar las respuestas del cuerpo a los estímulos manuales, logrando fusionar el conocimiento de la anatomía, fisiología y técnicas de masaje. Su investigación contribuyó a dar una base científica a lo que antes era considerado un arte más intuitivo, transformando el quiromasaje en una disciplina reconocida en el ámbito de la salud y el bienestar.
El quiromasaje en su forma más pura no es solo un alivio superficial, sino una técnica que trabaja a nivel profundo, ayudando a liberar tensiones acumuladas, mejorar la circulación, aliviar dolores musculares y reducir el estrés. Es una terapia que, al igual que el agua fluye a través de las manos del terapeuta, busca restablecer el equilibrio natural del cuerpo, reconociendo cada zona de tensión y transformándola con un toque preciso y adecuado.
En Et Suseia, utilizamos el quiromasaje como una de las herramientas clave en nuestra práctica, complementándola con otras terapias y técnicas para ofrecer una experiencia de sanación completa. La influencia del Dr. Ferrándiz sigue viva en nuestra metodología, pues su visión de integrar la ciencia con el arte del tacto nos permite no solo aliviar el cuerpo, sino también acompañarlo en su proceso de transformación y bienestar.
Cada sesión de quiromasaje que ofrecemos está diseñada para que el cuerpo se libere de las cargas físicas y emocionales que lo afectan.
A través de un masaje personalizado y consciente, buscamos que el cuerpo recuerde su equilibrio natural, devolviendo la armonía tanto en el plano físico como emocional.
Masaje de 60 min
La quietud que escucha y sostiene
La terapia craneosacral biodinámica es una forma sutil y profunda de acompañamiento terapéutico, basada en la capacidad innata del cuerpo para autorregularse y sanar. A través de un contacto muy suave, el terapeuta entra en relación con los ritmos naturales del organismo, especialmente con el llamado impulso de vida un movimiento respiratorio primario que fluye en los tejidos, en los líquidos y en el campo energético de la persona.
Este enfoque nace del trabajo osteopático del Dr. William Sutherland, y se ha ido desarrollando con aportes contemporáneos como los de Franklyn Sills, James Jealous y otros. En la formación de Sonia, guiada por Javier de María, se pone el acento en la escucha profunda, la presencia neutral del terapeuta y la confianza en la sabiduría inherente del cuerpo.
No se trata de intervenir ni de corregir, sino de ofrecer un espacio seguro y receptivo donde el sistema puede expresar aquello que necesita integrar, soltar o reorganizar. El terapeuta se convierte en un testigo silencioso, afinado con los movimientos lentos y amplios de la salud que emergen desde lo más profundo.
La sesión suele llevar al cuerpo y al sistema nervioso a un estado de calma y regulación muy beneficioso, favoreciendo procesos de sanación física, emocional y energética. Muchas personas experimentan una sensación de reencuentro con su eje interno, un descanso profundo, o una claridad que va más allá de las palabras.
En Et Suseia, la terapia craneosacral biodinámica es una invitación a detenerse, a ser escuchado en todos los niveles del ser, y a permitir que lo esencial se exprese, con suavidad, desde el centro.
Masaje de 40 min
El mapa del cuerpo en los pies
La reflexología podal es una terapia milenaria que encuentra sus raíces en antiguas culturas como la egipcia, la china y la india. Grabados hallados en tumbas egipcias muestran ya prácticas similares a esta técnica, que se basa en la idea de que en los pies se reflejan todos los órganos, glándulas y sistemas del cuerpo humano. En Occidente, fue desarrollada y sistematizada en el siglo XX por terapeutas como William Fitzgerald y Eunice Ingham, quienes establecieron los mapas reflexológicos modernos.
En Et Suseia, aplicamos la reflexología podal con una mirada sensible, terapéutica y personalizada. A través de presiones suaves y precisas en puntos concretos del pie, estimulamos las zonas reflejas del cuerpo con el objetivo de favorecer su equilibrio y funcionamiento natural.
Los beneficios de esta técnica son amplios y profundos:
Cada sesión es una invitación a soltar, a confiar, a permitir que el cuerpo reciba lo que necesita para restablecer su propio orden interno. Muchas personas se sorprenden al descubrir cuánto puede relajarse y equilibrarse el cuerpo entero a través del cuidado de los pies.
Masaje de 40 min
El arte de no hacer. Terapia desde la quietud y la escucha profunda
Hay una forma de tocar que no busca cambiar nada. Una forma de presencia que no dirige, no impone, no corrige… sino que simplemente está. Acompañando, como el silencio acompaña a la música. Esa es la esencia de la terapia Stillness.
Este enfoque nace de la evolución más sutil de la osteopatía, especialmente de su rama biodinámica, desarrollada a partir de la visión del Dr. Andrew Taylor Still y William Sutherland. Sin embargo, ha sido a través de maestros contemporáneos como Mike Boxhall y Kirill Yurievich que esta escucha ha alcanzado una profundidad verdaderamente contemplativa y transformadora.
Stillness, tal como la hemos experienciado y encarnado en nuestro recorrido especialmente en la formación experiencial con Kirill Yurievich no es una técnica en el sentido convencional. Es más bien una forma de estar: una presencia consciente, sensible, que se rinde al misterio del cuerpo y del ser. Es permitir que algo más grande se exprese sin intervención. El terapeuta no hace… pero está por completo.
En una sesión de Stillness, el cuerpo es escuchado sin juicio. No se busca un resultado. No se persigue el alivio, ni se manipula la estructura. Se ofrece un espacio seguro de profunda acogida, donde el sistema nervioso puede descender, soltar patrones de defensa y dejar que la sabiduría interior emerja. A veces esto se manifiesta como un descanso abismal; otras veces, como emociones que brotan, pulsos que se liberan, memorias que se disuelven.
En nuestro centro, Et Suseia, Stillness no es una técnica aislada: es una actitud que impregna todo lo que hacemos. Está presente en cada masaje lomilomi, en cada toque de reflexología, en cada escucha craneosacral. Es el fondo silencioso que sostiene el encuentro. Porque creemos que no hay mayor regalo que ofrecer presencia real, sin expectativas, sin prisa, sin necesidad de cambiar nada.
Et Suseia significa “Y se sigue”, como el Camino. Y así también lo entendemos: a veces el camino se detiene por fuera, para seguir dentro. Y es desde esa pausa fértil, desde ese silencio habitado, que algo profundamente vivo comienza a moverse.
En todos nuestros masajes utilizamos como base un aceite ecológico de almendras dulces, prensado en frío, enriquecido con esencias de alta calidad y una formulación exclusiva desarrollada por nosotros.
Contáctanos por WhatsApp o completa el formulario para reservar tu sesión. Estamos en el centro de Sarria.
